Recientemente es muy posible que hayas empezado a recibir invitaciones en tu calendario digital, ya sea el de Google, el de Apple, o el de cualquier otro proveedor de servicios online. Muchas más invitaciones de las que solías recibir y, además, de personas desconocidas que seguramente no hablen ni tu mismo idioma. Todo esto, no es más que una nueva forma, ni demasiado funcional, ni demasiado elegante, de poder llegar a millones de personas. ¿Quieres saber más sobre cómo funciona? ¿Quieres saber cómo aprovecharlo en tu estrategia de marketing digital?
Qué es y de donde viene
Este sistema de spam no es algo nuevo, pero del toca hablar ahora desde el gran crecimiento que tuvo durante el último Black Friday. Este sistema se aprovecha de una vulnerabilidad práctica, del que me aún me extraña que no se hayan aprovechado antes. La mayoría de servicios de calendarios/agendas digitales permiten que, teniendo tu dirección de email, otras personas puedan invitarte a un evento creado, de manera que tú puedas aceptar o rechazar esa invitación, pudiendo tener acceso a todos los detalles del evento. Esto permite que automáticamente ese evento se pueda añadir a tu calendario. Así como que la persona que te invitó reciba una notificación, ya sea de aceptación o de rechazo, sobre tu asistencia a ese evento.
Es una función de muchísima utilidad, que muchos de nosotros ya utilizamos no sólo a nivel profesional, sino también a nivel personal. Pero que por el contrario deja abierta esta posibilidad de que cualquier que tenga o adivine mi dirección de email pueda invitarme a un evento y hacerme llegar esa notificación de nueva entrada en el calendario.
¿Pero cómo me pueden llegar a mí si no tienen mi dirección de email? Estos spammers tienen diferentes vías para conseguir tu dirección de email. Puede que en algún momento te hayas registrado en alguna página de dudosa fiabilidad, y hayan conseguido de esta manera tu dirección de email. Puede que hayan conseguido hackear algún servicio de los que utilizas frecuentemente, consiguiendo así tus datos de contacto. O puede que, simplemente, hayan probado a enviar estas invitaciones a 10 millones de direcciones inventadas, y casualmente han conseguido averiguar la tuya entre otras muchas.
Es cierto que este tipo de spam nos llega desde rincones muy diferentes del planeta, pero parece que la gran mayoría proviene de países orientales. Como te imaginarás, son fáciles de identificar. Lo notarás por los caracteres ilegibles para la mayoría de nosotros que acompaña a esas invitaciones recibidas.
Cómo puedes evitarlo
Ahora mismo sólo puedes evitarlo limitando las opciones de invitación en la configuración del servicio que estés usando. Puedes limitarlo de dos maneras.
- Limitar que nadie te pueda invitar a un evento. Es la opción más radical. Si no trabajas en equipo, ni utilizas el calendario con tu pareja, familia o amigos… La opción más sencilla es impedir que nadie te pueda enviar invitaciones. Tu cuenta será un muro y te olvidarás en un momento de este tipo de molestias mal recibidas.
- Limitar que sólo te puedan invitar a eventos las personas que están en tu agenda de contactos. Parece la opción más sensata en un principio. Pero si usar el calendario a nivel profesional, sólo tendrás que revisar los últimos eventos para comprobar que la mayoría de eventos proceden de personas que no tienes en la agenda de contactos del servicio de calendario digital que utilizas. Esto limitará su funcionalidad en la práctica y, aunque elimine el problema del spam, también limitará la comodidad que te ofrecía hasta ese momento.
A finales de este 2016 han saltado las alarmas sobre este tipo de publicidad intrusiva, y tanto Google como Apple se están poniendo las pilas para trabajar en una solución fácil y rápida que nos permita olvidarnos del spam calendar.
Qué hacer cuando nos llega una de estas invitaciones
Realmente no importa el servicio digital que estemos utilizando. En cualquiera de los casos, recibiremos una notificación para dar una respuesta a esa invitación. «Aceptar, Quizás y Rechazar» suelen ser las tres opciones más comunes. Esta notificación nos llega en nuestro ordenador, en nuestro móvil, en nuestra tablet, y a veces incluso mediante un email. Lo primero que se nos pasa por la cabeza es rechazar cada una de esas invitaciones. ¡Error!
Lo primero que se nos pasa por la cabeza es rechazar cada una de esas invitaciones. ¡Error!
¿Y por qué es esto? Al rechazar la invitación estamos confirmando al spammer que nuestra dirección de email existe, y que hay alguien detrás gestionándola. Saben que su mensaje te ha llegado, y no van a dudar seguir utilizándola para hacerte llegar otros mensajes comerciales. Es algo así como dejarles pasar a casa, darles té con pastas e invitarles a volver cada vez que lo deseen. ¡No lo hagas!
La única solución actualmente para dejar de verlo en tu calendario, es crear una nueva categoría de calendario llamada «basura» o con el nombre más ingenioso que se te ocurra. Poner esa categoría del calendario como oculta y mover ese evento al que te han invitado a esta nueva categoría oculta de tu calendario. Insisto, sin aceptar, ni rechazar, sin contestar a esa invitación recibida.
Cómo integrarlo en tu estrategia de marketing online
Supongo que llegas a este punto esperando encontrar una serie de pasos que te permitan aprovechar esta vulnerabilidad para sacarle partido dentro de tu actual estrategia online. Te pido disculpas, pero no es lo que pienso aportarte. El mayor consejo que te puedo dar es que te olvides de ello. Como se indica desde el título de este artículo, estamos hablando de spam, de publicidad no solicitada que nunca es bien recibida por el consumidor. Esto provocará que más que aportar valor, consigas molestar a tu cliente potencial, y que al igual que ocurre con los que hacen spam mediante email, o incluso a través de las etiquetas en las redes sociales de manera indiscriminada, acabarás provocando que la gente odie tu marca.
Así que, por favor, sal a hacer deporte, queda con los amigos, date una vuelta… lo que sea necesario hasta que te olvides de esa idea que te estaba rondando por la cabeza.
Si estás pensando en utilizar el spam calendar en tu estrategia de marketing digital, olvida completamente la idea. Sería tirar piedras sobre tu propio negocio.
