En Wanaleads somos muy de nuestro blog. Desde hace años, cada semana un compañero de nuestro equipo escribe sobre algún tema relacionado con el área que está especializado. Incluso en más de una ocasión hemos hablado sobre la conveniencia de tener un blog en tu empresa o incluso hemos dado consejos sobre de qué escribir cuando se acaba la inspiración.
Ya sabes (y si no, te lo digo en este párrafo ?) que un blog tiene muchos beneficios de cara al SEO, a posicionarte como experto, a atraer visitantes que ya están previamente interesados en un tema concreto y a generar contenido muy valioso para el Marketing de Contenidos tu negocio… ¡Pero esto es solo si lo haces bien!
Hoy vengo a contarte, basándome en la experiencia que tenemos en nuestra agencia con el blog, algunos consejos para que no caigas en algunos errores que son bastante más comunes de lo que podrías pensar.
1. No ser cercano
Este punto lo pongo el primero porque me desespera un poco. Hay que irse a temas muy delicados para encontrar un negocio donde no puedas ser cercano y, por ejemplo, hablar de tú a los lectores de su blog.
Aún en 2022 nos encontramos blogs donde la persona que escribe es sobria, seria y excesivamente formal escribiendo, aún cuando la temática no requiere esa formalidad. Debes saber contar historias, y al igual que se dice que no casi hay nada que se pueda decir con una sonrisa, no hay casi nada que no se pueda contar en un blog de una forma cercana.
2. Escribir como si no hubiera un mañana
A veces estamos metidos en nuestra película y empezamos a redactar, y redactar, y redactar… Y es posible que estemos abrumando al lector con demasiada información posiblemente innecesaria.
A Google le va a encantar un post con 5.000 palabras pero salvo que el material sea oro molío como decimos por aquí, es probable que los lectores de tu blog no lleguen a leérselo todo.
Intenta encontrar un punto de equilibrio entre contenido que sea valioso a nivel SEO y a su vez práctico y ameno de leer para la persona que llega a él como lector.
3. Cantidad sobre calidad
Estoy de acuerdo contigo: Mola muchísimo tener un blog con centenares de entradas, pero… Siempre que esas entradas digan algo.
La frecuencia de publicación ideal para un blog es sencillamente esa frecuencia que puedas mantener en el tiempo y que te permita buscar buena información, ordenarla, darle tu enfoque y publicarla con la máxima calidad que puedas aportar.
Si tú o tu equipo sois capaces de publicar 5 post de un nivel exquisito a la semana, sinceramente me descubro ante ti. Pero piensa si eso lo vas a poder mantener en el tiempo y con la calidad que te has propuesto.
4. No ponerte en la piel del lector
En este punto trato un tema similar al del punto 2 pero desde el punto de vista de la usabilidad. Es muy frustrante encontrar enlaces que no funcionan, o que dirigen a un sitio equivocado, contenidos gráficos que son ilegibles (cuidado con grandes infografías en móviles).
En serio, por obvio que pueda parecer, antes de publicar haz un pequeño repaso y asegúrate que cuando haya un botón o un texto que diga algo como «Primero en Google: La guía SEO definitiva», vaya a descargar esa guía.
5. Me da igual el SEO
Puede que tu objetivo no sea favorecer el posicionamiento web con tu blog… Pero es que a poco que lo hagas bien va a favorecer y mucho.
No caigas en el error de currarte un contenido bastante bueno y luego no agregar imágenes, enlaces, o añadir descripciones o enlaces donde mandes al lector contenido relacionado que tú mismo (o tu equipo) has elaborado.
Poner un poco de cariño a factores SEO en tu blog va a hacer que el contenido llegue a mucha más gente. Después de todo, ese es el objetivo… ¿No?
